¿Adulto y vacunado o derecho a la vida?

“Adulto y Vacunado” o… ¿Derecho a la Vida? – Un padre describe la dramática historia que vivió su familia a causa de las vacunas obligatorias

Se trata de una historia de la vida real, contada por el protagonista de la historia, que luchó junto a su familia durante veinte años para que saliera a la luz la "verdad" sobre la autoría directa de la vacuna antipolio de Sabin, causante de la muerte. de dos de sus hijos y de la enfermedad de Albert.

Marco murió a la edad de seis años; Andrea, la gemela monoovular de Alberto, murió a los cuatro años y la misma suerte le estaba reservada a él también. Alberto sobrevivió, sufriendo heridas muy graves, pero lo suficientemente "vivo" para ser "él mismo" testigo viviente de la verdad sobre la vacunación contra la poliomielitis: una verdad nunca aceptada y negada a priori.
Este libro expone los abusos y engaños que ha llevado a cabo el sistema de salud para silenciar a esta incómoda familia: a pesar de ello, su grito desesperado de dolor ya ha llegado a muchas personas, y hoy con este “libro-documento” proponen poner en alerta cómo muchos todavía corren el riesgo de repetir lo que ya les sucedió.

“No es posible permanecer indiferente ante el holocausto sufrido por nuestra familia, y por una inmensa cantidad desconocida de otras familias, pensando que solo fueron raras fatalidades, porque a la vuelta de la esquina la misma experiencia puede afectar a cada uno de ustedes”.

Ciertamente no es anarquía rechazar un acto médico riesgoso; el riesgo ciertamente existe e incluso una ley del estado italiano lo admite, la número 210 de febrero de 1992. ¿Cuántas veces se han aprobado leyes que resultaron ser incorrectas? En ciertos países de nuestro planeta hay leyes que imponen la pena de muerte, para salvaguardar el derecho a la vida hay debate (?) para abolir el aborto, entonces no me doy cuenta por qué no debo estar al lado de esos padres por los que luchan salvaguardar el derecho a la salud de sus hijos que, a causa de las vacunas, podrían quedar discapacitados o incluso perder la vida. ¿Quizás, en estos casos, se piensa que son hijos de un Dios menor? Incluso la ley que impone la vacunación obligatoria, emitida hace muchos años, cuando las enfermedades infecciosas aún eran endémicas, puede haber quedado obsoleta.
Hoy, ciertas enfermedades para las cuales es necesaria la vacunación han desaparecido o se encuentran aisladas en pequeños brotes en países donde la población se mantiene en un estado social de degradación, privada de las más comunes y elementales normas de higiene y, además, también desnutrida, un elemento útil e indispensable para combatir posibles epidemias de enfermedades infecciosas. En países occidentales como el nuestro, afortunadamente, estas situaciones ya no existen. Las famosas epidemias de cólera y peste que ocurrieron hace muchos años nunca se han vuelto a repetir, ciertamente no porque fueran erradicadas con vacunas, ya que aún no se habían inventado en ese momento, sino que la propia naturaleza ha solucionado esos problemas. Podría objetarse que, hoy, en tiempos de "globalización", podría existir el riesgo de un posible retorno de ciertas enfermedades infecciosas. En mi opinión es sólo una nueva y más justificación necesaria para los productores de vacunas, ya que, a través de este absurdo terrorismo, en lugar de proponer higiene y llevar una alimentación adecuada a los pobres, tienden a mantenerlos esclavos de su poder económico explotando "su ignorancia". ".
El derecho a vivir:

“La vida es el primer y más grande regalo que recibimos del amor de Dios y de nuestros padres. Todo niño nace para vivir. Cada uno de ellos es un signo de la confianza del Creador en la humanidad. Todo hombre tiene un valor infinito: creado a imagen y semejanza de Dios, redimido por la sangre de Cristo, destinado a la felicidad del paraíso. Salvar una vida es el acto de Caridad más meritorio hacia el prójimo”.

Con el permiso de su hijo Luca, ponemos a su disposición el PDF del libro.